Jan Walta

Es increíble cómo, después de un día, mis hijos (de 6 y 7 años), se responsabilizaron del tiempo que pasaban con la televisión, el ordenador, el iPad, etc. Pueden usarlos cuando quieran, pero no más de lo que les corresponde cada día. Ahora son más conscientes del tiempo del que disponen. Se distribuyen su propio tiempo a lo largo del día. No hay más discusiones. No hay quejas. Ahora ellos mismos apagan la televisión cuando se acaba su tiempo. Al principio no podíamos creer lo que veíamos. Pero ahora es la “nueva normalidad”. 🙂